Aadir un poco de texto 3

5.- COVID-19, Fatiga Crónica y Fibromialgia

Las infecciones víricas y no víricas se han descrito como uno de los componentes de estos cuadros multifactoriales llamados fatiga crónica y fibromialgia.

Tras la epidemia del SARS del 2003, producida por un coronavirus con ciertas diferencias con el actual, se vio en varios estudios realizados en Hong Kong y en Canadá un aumento de los casos de fatiga crónica y fibromialgia en el seguimiento de los supervivientes. Es de esperar que podamos cuadros de este tipo tras esta pandemia, que además ha afectado a un número mucho mayor de personas que el SARS.

La fatiga post viral, como lo han llamado en algún estudio, produce un cuadro de características similares a la la fatiga crónica, y se caracteriza principalmente por la fatiga, acompañada de otros síntomas como dolor muscular (menor que en la fibromialgia), cefaleas, trastornos del sueño, dificultad de concentración y depresión.

El presente COVID-19 parece que puede afectar al sistema nervioso central de varias maneras: produce cefalea, disminución de conciencia, anosmia, se ha descrito encefalitis….Por otra parte está por ver los efectos secundarios a nivel pulmonar, muscular o de otros órganos que puedan afectar a la calidad de vida y que aparezcan en los próximos meses. Todo esto, junto con las características y circunstancias personales vividas y de manejo de la pandemia, puede hacer que veamos un aumento de los casos de estas patologías.